El mandatario aseguró que no descartaba ninguna pista pero que se había abierto una investigación por “intento de homicidio” tras la explosión del miércoles por la noche en la segunda ciudad de Rusia, donde ya se produjo un atentado mortal el pasado abril.
“Ayer (miércoles) se cometió un acto terrorista en San Petersburgo”, declaró Putin al comenzar una ceremonia de entrega de condecoraciones a militares rusos que participaron en operaciones en Siria.
El presidente ruso anunció haber ordenado a los servicios de seguridad del país (FSB) “liquidar a los bandidos sobre el terreno” cuando sean detenidos en Rusia “en caso de amenaza a la vida o a la salud” de las fuerzas de seguridad.
“Se trata de quienes se preparen para cometer atentados en nuestro país”, precisó ante la prensa su portavoz, Dimitri Peskov.
En un comunicado publicado por la noche, el Comité Nacional Antiterrorista (NAK) había indicado que está “coordinando” la investigación.
“Un artefacto de fabricación casera colocado en un casillero de la consigna estalló” en ese supermercado situado en la avenida Kondratiev, explicó el comité, precisando que la carga era “equivalente a 200 gramos de TNT”.
Los investigadores “buscan a las personas relacionadas con ese delito”, subrayó.
Pasos del sospechoso
El portal de información local Fontanka.ru difundió ayer imágenes de las cámaras de vigilancia en las que aparecía el sospechoso de provocar la explosión.
En esas imágenes, el individuo, vestido con una chaqueta verde con capucha, aparecía, primero, con una mochila, visiblemente pesada, y después, saliendo del supermercado sin la mochila.
Según el último recuento, 14 personas resultaron heridas en la explosión, seis personas seguían hospitalizadas, dijeron las autoridades.